¿Qué son las emociones y para qué sirven?

De acuerdo con la Real Academia Española (RAE) la palabra emoción significa “𝐴𝑙𝑡𝑒𝑟𝑎𝑐𝑖𝑜́𝑛 𝑑𝑒𝑙 𝑎́𝑛𝑖𝑚𝑜 𝑖𝑛𝑡𝑒𝑛𝑠𝑎 𝑦 𝑝𝑎𝑠𝑎𝑗𝑒𝑟𝑎, 𝑎𝑔𝑟𝑎𝑑𝑎𝑏𝑙𝑒 𝑜 𝑝𝑒𝑛𝑜𝑠𝑎, 𝑞𝑢𝑒 𝑣𝑎 𝑎𝑐𝑜𝑚𝑝𝑎𝑛̃𝑎𝑑𝑎 𝑑𝑒 𝑐𝑖𝑒𝑟𝑡𝑎 𝑐𝑜𝑛𝑚𝑜𝑐𝑖𝑜́𝑛 𝑠𝑜𝑚𝑎́𝑡𝑖𝑐𝑎”.

Esto nos dice que hablar de emociones es hablar de la interacción de factores biológicos, fisiológicos y psicológicos, es por ello que como diría Georgio Nardone, son un fenómeno complejo pues constituyen la respuesta a estímulos percibidos y reconocidos que activarán reacciones específicas.

Dentro del universo de las emociones existen la emociones 𝗽𝗿𝗶𝗺𝗮𝗿𝗶𝗮𝘀 𝗼 𝗯𝗮́𝘀𝗰𝗶𝗮𝘀 𝘆 𝗹𝗮𝘀 𝘀𝗲𝗰𝘂𝗻𝗱𝗮𝗿𝗶𝗮𝘀 𝗼 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗹𝗲𝗷𝗮𝘀. 

Las primeras son innatas y tienen un componente biológico, es decir, son heredadas y son necesarias para nuestra 𝘀𝘂𝗽𝗲𝗿𝘃𝗶𝘃𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮.

Por otra parte, las segundas surgen de la combinación de las emociones primarias, formando un amplio abanico de estados emocionales.

En esta ocasión te compartiré la función de las emociones primarias o báscias, las cuales son: 𝗹𝗮 𝗮𝗹𝗲𝗴𝗿𝗶́𝗮, 𝗹𝗮 𝘁𝗿𝗶𝘀𝘁𝗲𝘇𝗮, 𝗲𝗹 𝗺𝗶𝗲𝗱𝗼, 𝗹𝗮 𝗶𝗿𝗮, 𝗹𝗮 𝘀𝗼𝗿𝗽𝗿𝗲𝘀𝗮 𝘆 𝗲𝗹 𝗲𝗹 𝗮𝘀𝗰𝗼.

Asi que… ¡Comencemos!

Alegría.

Su función es promover la repetición de una actividad o una conducta pues nos da una sensación de recompensa la cual provoca una emoción placentera.

La alegría es necesaria para la afiliación así como para disfrutar de diferentes aspectos de la vida ya que genera actitudes positivas hacía uno mismo y hacía los demás favoreciendo el altruismo y la empatía.

Tristeza.

Su función es ayudarnos a asumir la pérdida de un objeto de afecto.

Este objeto de afecto puede ser una relación afectiva, un ser querido, un trabajo e incluso un objeto en sí.

Va a ayuda a facilitar la introspección, a despedirnos del objeto de afecto y fomentar el apoyo social.

Miedo.

La función del miedo es impedir que nos pongamos en situaciones de riesgo, es decir, aquellas en las que podríamos salir heridos.

Sin embargo, en caso de estar ante una situación de peligro, nos ayudará a ponernos en marcha para hacer lo necesario para evitar, asumir o afrontar el riesgo de manera adecuada.

Ira.

Su función  es la autoprotección, pues ayuda a desarrollar de forma rápida conductas que nos permitan defendernos ante situaciones desagradables o generadoras de frustración.

Sorpresa.

La función de esta emoción es ambigua, ya que puede ser positiva o negativa dependiendo de la situación.

La sorpresa nos va a preparar para acontecimientos inesperados, facilitando la aparición de una reacción emocional y conductual apropiadas ante situaciones novedosas.

Asco.

Esta emoción nos va a ser útil para para  evitar aquellas situaciones que puedan comprometer nuestra salud. tratar de proteger el organismo de la ingestión de alimentos en malas condiciones nos va a proteger de ingerir alimentos que pueda resultar no placenteros o puedan perjudicar nuestra salud.

Es decir, su función va a ser ayudarnos a mejorar nuestros hábitos de higiene.

Es importante entender que no existen las emociones positivas o negativas, mas bien estas pueden ser adaptativas o desadaptativas.

Las funciones adaptativas son aquellas que nos ayudan a resolver un problema, las funciones desadaptativas son aquellas que en lugar de ayudarnos a resolver los desafíos nos pueden llevar a meternos en mayor problemas.

Es por esta razón que es importante conocer cuál es la función de cada una de ellas. El psicólogo argentino Norberto Levy, hace una excelente analogía sobre esto, pues el refiere que las emociones son como los foquitos del tablero de mando de un automovil, pues cada vez que uno de los foquitos (emoción) se enciede, nos indica que hay una necesidad que atender.

Si quieres aprenderder a gestionar mejor tus emociones para que estas sea más adaptatvias, te invito a asistir a con un psicólogo o psicóloga profesional que te pueda brindar las herramientas que necesitas.

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